El virus del herpes simple 2 (VHS-2) se transmite principalmente a través de las relaciones sexuales, provocando el herpes genital. Se estima que la prevalencia global de la infección por el VHS-2 es del 11,3%, pero puede ser mayor en grupos de riesgo específicos, como pacientes con SIDA y trabajadoras sexuales de sexo femenino1. La infección por el VSH-2 es un factor de riesgo de transmisión del VIH y se asocia a un mayor riesgo de contraer el VIH.2
El herpes neonatal, que puede tener su origen en el VHS-2 o en el VHS-1, tiene las implicaciones más graves y se contrae habitualmente durante el parto por medio de una exposición al aparato genital2. La diseminación vírica subclínica y las infecciones no identificadas parecen ser factores importantes en la transmisión.1 La infección genital por VHS muchas veces pasa desapercibida y el diagnóstico basado solo en la presentación clínica tiene una baja sensibilidad.2
Las pruebas serológicas específicas del tipo para la detección de IgG, basadas en el uso de la glucoproteína G del VHS-1 (gG1) recombinante y la glucoproteína G del VHS-2 (gG2) recombinante, permiten la identificación de portadores asintomáticos de la infección por el VHS-2 en pacientes con o son anticuerpos preexistentes contra el VHS-1 3,4,5. La serología específica del tipo debe guiar las pruebas y la interpretación de los resultados. Esto es importante para un desarrollo adecuado de estrategias para prevenir la transmisión a las parejas y los neonatos, ofrecer asesoramiento y controlar la enfermedad.6 No se recomiendan las pruebas de IgM en la práctica clínica de rutina6.