Los avances en la atención sanitaria han dado lugar a un nuevo tipo de amenaza.
Las infecciones asociadas a la asistencia sanitaria (IAAS) son el evento adverso más frecuente de la atención sanitaria.1 Las estancias hospitalarias prolongadas, la discapacidad a largo plazo, la resistencia de los microorganismos a los antimicrobianos, las considerables cargas económicas y la muerte subrayan la amenaza que las IAAS suponen para los pacientes, sus familias y los sistemas sanitarios.1
A medida que los países luchan por controlar la complejidad de las IAAS sin criterios uniformes para el diagnóstico, estas infecciones han aumentado drásticamente, con implicaciones más allá de la salud del paciente.1,2
- El 5-10 % de las hospitalizaciones en Europa y Norteamérica dan lugar a una IAAS, lo que cuesta a Europa aproximadamente 7000 millones de euros anuales en costes directos, así como 16 millones de días adicionales de hospitalización.1,3
- El 40 % de las hospitalizaciones en América Latina, África subsahariana y Asia dan lugar a una IAAS, aunque el impacto económico se notifica de forma deficiente y variable.3
Aunque puede ser imposible eliminar las IAAS, los centros asistenciales pueden reducir significativamente el riesgo de contraerlas.4 Las medidas de prevención incluyen la implantación de programas de vigilancia y un control más proactivo de las infecciones.